Tomar aspirina a diario: ¿podría salvarle la vida?
Tomar aspirina a diario: ¿podría salvarle la vida?
Además de sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas, la aspirina puede ser útil para mejorar otras afecciones de salud cardiovascular.
Si ha tenido un ataque cardíaco o un derrame cerebral, una dosis baja diaria de aspirina para ayudar a prevenir otro. La aspirina es parte de un plan de tratamiento bien establecido para personas con antecedentes de ataque cardíaco o accidente cerebrovascular.
Tome una dosis baja de aspirina todos los días después de hablar con su profesional de atención primaria de salud. Los riesgos y beneficios varían para cada persona.
¿Qué es la aspirina?
La aspirina es un analgésico de uso común. Pertenece al grupo de fármacos denominados antiinflamatorios no esteroideos.1
La aspirina también se conoce como ácido acetilsalicílico. Es un medicamento comúnmente utilizado para reducir el dolor, la fiebre o la inflamación. Inicialmente se derivó de la corteza del sauce y se ha utilizado durante siglos para tratar diversas dolencias.
La aspirina es un nombre genérico y está disponible en varias marcas diferentes, como Bayer.
¿Cómo funciona la aspirina?
La aspirina actúa inhibiendo una enzima llamada ciclooxigenasa (COX). Hay dos tipos de enzimas ciclooxigenasa: COX-1 y COX-2. La aspirina inhibe ambas enzimas, que desempeñan funciones críticas en la producción de prostaglandinas. Las prostaglandinas son compuestos lipídicos que tienen varias funciones importantes en el cuerpo, incluida la mediación de la inflamación, el dolor y la fiebre.
- Inhibición de COX-1: Al inhibir la COX-1, la aspirina reduce la producción de prostaglandinas protectoras en el revestimiento del estómago, lo que a veces puede provocar úlceras de estómago o hemorragia gastrointestinal.
- Inhibición de la COX-2: Al inhibir la COX-2, la aspirina reduce el proceso inflamatorio y ayuda a aliviar el dolor y la fiebre.
¿Cuáles son los usos de la aspirina?
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. ha aprobado la aspirina para muchas indicaciones diferentes, como por ejemplo:
- Alivio temporal de dolores y molestias menores.
- Accidente cerebrovascular o accidente cerebrovascular isquémico para prevenir eventos cardiovasculares posteriores o la muerte.
- Para reducir el riesgo de muerte en personas con sospecha de ataques cardíacos agudos (infartos de miocardio)
- Para prevenir ataques cardíacos recurrentes
- Para reducir el riesgo de ataques cardíacos o muerte súbita en personas con angina de pecho (dolor de pecho) inestable y crónica estable.
- Otras afecciones coronarias como angioplastia y operaciones de derivación coronaria
- Para aliviar los signos y síntomas de diferentes artritis, incluyendo artritis reumatoide, artritis reumatoide juvenil, osteoartritis, espondiloartropatías y artritis y pleuresía asociadas con lupus eritematoso sistémico.
- Antiinflamatorio
- Antipirético (reductor de fiebre)
¿Cómo protege la aspirina la salud del corazón?
Otros AINE como el paracetamol, el ibuprofeno, el naproxeno sódico y el ketoprofeno son buenos medicamentos para el dolor y la fiebre. Sin embargo, la aspirina ha demostrado un efecto beneficioso en la prevención de otro ataque cardíaco o derrame cerebral en personas que padecen una enfermedad cardiovascular o que ya han sufrido un ataque cardíaco o un derrame cerebral.
Desempeña un papel crucial en la protección cardiovascular, principalmente a través de sus efectos antiplaquetarios. Cuando las plaquetas en la sangre se agrupan, forman coágulos que pueden bloquear los vasos sanguíneos. Puede provocar eventos cardiovasculares graves, como ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
La aspirina inhibe la agregación plaquetaria al bloquear la acción de la COX-1, que es necesaria para la síntesis del tromboxano A2, un fuerte promotor de la agregación plaquetaria. Al reducir la producción de tromboxano A2, la aspirina reduce la tendencia de las plaquetas a unirse, reduciendo así el riesgo de formación de coágulos.2
En personas que han tenido un ataque cardíaco previo o que tienen un alto riesgo de sufrir un ataque cardíaco, la aspirina en dosis bajas puede ayudar a prevenir eventos futuros al mantener abiertos los vasos sanguíneos y prevenir la formación de coágulos.
¿Puede la aspirina ayudar a prevenir un accidente cerebrovascular?
El papel de la aspirina en la prevención del accidente cerebrovascular está relacionado principalmente con sus efectos antiplaquetarios, que ayudan a prevenir la formación de coágulos sanguíneos que pueden bloquear el flujo sanguíneo al cerebro y provocar un accidente cerebrovascular isquémico. Sin embargo, su uso debe evaluarse cuidadosamente debido a los riesgos potenciales asociados con la terapia con aspirina.
Prevención primaria del accidente cerebrovascular
Los accidentes cerebrovasculares isquémicos (accidentes cerebrovasculares debidos a la falta de suministro de oxígeno), que constituyen la mayoría de los casos de accidentes cerebrovasculares, ocurren cuando un coágulo de sangre bloquea una arteria que suministra sangre al cerebro. Al inhibir la agregación de plaquetas, la aspirina reduce la probabilidad de que se formen estos coágulos. Puede ser particularmente beneficioso para personas que ya han experimentado un accidente cerebrovascular isquémico o un ataque isquémico transitorio (AIT), a menudo llamado «mini accidente cerebrovascular».
El uso de aspirina en prevención primaria, es decir, en personas que aún no han sufrido un accidente cerebrovascular u otro evento cardiovascular pero que se consideran en riesgo, requiere un enfoque sutil. Los beneficios de la prevención del accidente cerebrovascular deben sopesarse frente al mayor riesgo de hemorragia, incluida la hemorragia gastrointestinal y los accidentes cerebrovasculares hemorrágicos (sangrado).3
Prevención del accidente cerebrovascular secundario
En prevención secundaria, para las personas que han tenido un accidente cerebrovascular o AIT previo, comúnmente se recomienda una dosis baja de aspirina para reducir el riesgo de otro accidente cerebrovascular. Esta estrategia de prevención secundaria ayuda a mantener un flujo sanguíneo adecuado al cerebro y previene la formación de nuevos coágulos.
Para quienes corren riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular isquémico (causado por coágulos sanguíneos que bloquean el flujo sanguíneo al cerebro), los efectos antiplaquetarios de la aspirina ayudan a reducir la probabilidad de formación de coágulos y mejoran el flujo sanguíneo, lo que reduce el riesgo de sufrir otro accidente cerebrovascular.
Riesgo de uso de aspirina
Si bien la aspirina ofrece importantes beneficios para la salud cardiovascular, no está exenta de riesgos. Las principales preocupaciones con el uso prolongado de aspirina implican hemorragia gastrointestinal y accidente cerebrovascular hemorrágico, que es causado por una hemorragia en el cerebro.
Sangrado gastrointestinal
Debido a que la aspirina inhibe la COX-1 y reduce las prostaglandinas protectoras en el revestimiento del estómago, puede causar irritación y potencialmente provocar úlceras y sangrado. Este riesgo es mayor en personas con antecedentes de problemas gastrointestinales o en quienes toman otros medicamentos que también irritan el estómago.
Accidente cerebrovascular hemorrágico
Aunque el uso profiláctico de aspirina reduce el riesgo de accidente cerebrovascular isquémico, puede aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular hemorrágico debido a sus propiedades anticoagulantes. Este tipo de accidente cerebrovascular ocurre con menos frecuencia pero puede ser más grave y difícil de tratar.
Debido a estos riesgos, es esencial que la decisión de utilizar aspirina para los trastornos cardiovasculares y la prevención de accidentes cerebrovasculares se pueda tomar en consulta con un proveedor de atención médica.
Efectos secundarios y precauciones
Si bien la aspirina se usa ampliamente y generalmente es segura para la mayoría de las personas, puede causar efectos secundarios, particularmente cuando se usa a largo plazo o en dosis altas. Los efectos secundarios comunes incluyen:
- Problemas gastrointestinales como dolor de estómago, acidez de estómago y úlceras.
- Mayor riesgo de hemorragia debido a sus efectos anticoagulantes.
- Reacciones alérgicas en algunas personas, que se presentan como urticaria, hinchazón o dificultad para respirar.
La aspirina debe usarse con precaución en determinadas poblaciones, entre ellas:
- Niños y adolescentes: La aspirina no se recomienda para niños o adolescentes con infecciones virales debido al riesgo de sufrir el síndrome de Reye, una enfermedad rara pero grave.
- Mujeres embarazadas: Generalmente se recomienda evitar la aspirina durante el embarazo a menos que la recete un médico, ya que puede afectar tanto a la madre como al feto en desarrollo.
- Personas con trastornos hemorrágicos: Debido a sus efectos anticoagulantes, las personas con trastornos hemorrágicos deben evitar la aspirina.
Resumen
La aspirina puede desempeñar un papel fundamental en la prevención de los accidentes cerebrovasculares, en particular los isquémicos, a través de sus efectos antiplaquetarios. Sin embargo, su uso debe adaptarse cuidadosamente al perfil de salud de cada individuo para equilibrar los beneficios de la prevención del accidente cerebrovascular con los riesgos potenciales de hemorragia y otras complicaciones.
La participación de un proveedor de atención médica es esencial para determinar la idoneidad de la terapia con aspirina en el contexto de la prevención del accidente cerebrovascular y garantizar que los beneficios superen los posibles efectos negativos.
En conclusión, la aspirina es un medicamento versátil con una amplia gama de usos, particularmente en el alivio del dolor, la reducción de la inflamación y la protección cardiovascular. Sin embargo, es importante utilizarlo de forma responsable y bajo la supervisión de un profesional de la salud para minimizar los posibles riesgos y efectos secundarios.
Fuentes: