¿Qué es la placenta previa? Signos, factores de riesgo y tratamientos.
Aunque existen una serie de complicaciones que pueden ocurrir durante el embarazo, la mayoría de las personas no experimentarán problemas importantes. Y su equipo de atención trabajará con usted para ayudar a garantizar que su embarazo sea tranquilo. Pero aún así es importante estar consciente de lo que puede suceder, para saber cuándo hablar con su médico sobre otros síntomas o inquietudes.
La placenta previa es una de estas complicaciones. Por lo general, se descubre mediante exámenes de ultrasonido durante las citas prenatales de rutina y la mayoría de los casos se resuelven por sí solos en el tercer trimestre. Sin embargo, la placenta previa puede afectar la forma en que su equipo la atiende durante el embarazo y el parto.
Continúe leyendo para saber qué es la placenta previa, cuáles son sus factores de riesgo, cómo identificarla y qué tratamiento esperar si se diagnostica.
La placenta previa es un problema con la posición de la placenta que puede causar complicaciones importantes en el embarazo.
La placenta, el órgano que se forma durante el embarazo para proporcionar oxígeno y nutrientes al bebé, generalmente se adhiere al costado o a la parte superior del útero. La placenta previa es una afección que ocurre cuando la placenta se adhiere lo suficientemente bajo en el útero como para cubrir todo o parte del cuello uterino. Afecta aproximadamente al 11% de los embarazos en la semana 20 de embarazo, pero solo continúa en el tercer trimestre en aproximadamente el 0,3-2% de esos casos, y el resto se resuelve por sí solo. La placenta previa puede causar problemas importantes durante el embarazo, que incluyen:
- sangría, lo cual es un síntoma grave que requiere evaluación experta.
- Separación temprana de la placenta de la pared uterina. lo que puede causar un sangrado significativo y requerir un parto prematuro.
- Nacimiento prematuro o bajo peso al nacer en casos de parto anticipado.
Causas de la placenta previa
No se comprende bien la causa exacta de la placenta previa. Los estudios han sugerido que puede estar asociado con daños en el revestimiento del útero. Las cicatrices del útero son ricas en oxígeno y colágeno, que un óvulo fecundado necesita para implantarse y empezar a crecer. Entonces, si hay una cicatriz cerca del cuello uterino, un óvulo puede implantarse allí en lugar de en una posición más normal, más arriba en el útero.
La placenta previa puede no presentar síntomas
La mayoría de los casos de placenta previa se diagnostican al principio del embarazo mediante ecografías. Dado que la mayoría de los casos se resuelven en el tercer trimestre, la afección suele no presentar síntomas. En el pequeño porcentaje de casos que persisten, el síntoma principal suele ser un sangrado vaginal indoloro y de color rojo brillante. A veces, esto se puede comparar con las contracciones uterinas.
Informe a su médico de inmediato si tiene sangrado vaginal en cualquier momento durante el embarazo. Si el sangrado es severo, llame al 911 o vaya a un hospital.
Cómo saber si tienes riesgo de tener placenta previa
Aunque se desconoce la causa exacta de la placenta previa, los estudios han demostrado que está asociada con ciertas características del embarazo y factores de riesgo. Estos incluyen:
- Embarazo anterior
- Placenta previa en un embarazo anterior
- Parto por cesárea (cesárea) en un embarazo anterior
- Estar embarazada de múltiples (como gemelos o trillizos)
- El uso de tecnologías de reproducción asistida, como la fertilización in vitro (FIV)
- Cicatrización uterina o antecedentes de procedimientos uterinos.
- Que tengas 35 años o más
- fumar tabaco
- ellos usan cocaina
¿Cómo se diagnostica la placenta previa?
La placenta previa generalmente se diagnostica mediante una ecografía abdominal durante el segundo o tercer trimestre. Alrededor del 90% de los casos mejoran por sí solos. Esto se debe a que la placenta puede crecer gradualmente hacia una posición más normal donde hay un mejor suministro de sangre.
Cómo controlar y tratar la placenta previa
Si le diagnostican placenta previa, su equipo de atención le pedirá que reduzca su actividad general. Si persiste en el tercer trimestre, es posible que le pidan que evite la actividad sexual, el ejercicio moderado a intenso, levantar más de 20 libras y sentarse por largos períodos de tiempo. Su equipo de atención le pedirá que se someta a ecografías más frecuentes para realizar un seguimiento del desarrollo de su placenta. Si deja de cubrir el cuello uterino, es posible que pueda realizar un parto vaginal.
Sin embargo, si la placenta permanece cerca del cuello uterino, puede estirarse debido a los cambios que atraviesa el cuello uterino para prepararse para el parto. Este estiramiento presenta un riesgo de sangrado severo durante el parto vaginal, por lo que si la placenta continúa bloqueando el cuello uterino, su médico le hablará sobre el parto por cesárea y qué esperar que lo lleve.
El principal tratamiento para la placenta previa no resuelta es la cesárea.
Casi todos los casos de placenta previa que no se resuelven en el tercer trimestre se tratan mediante cesárea. Si necesita una cesárea, su médico programará el parto para alrededor de la semana 36-37 del embarazo, posiblemente antes si su situación lo requiere. El objetivo de su equipo de atención será ayudarla a superar la mayor parte posible del embarazo.
Si experimenta sangrado vaginal, es posible que le pidan que permanezca en el hospital para un seguimiento más estrecho. Si el sangrado se detiene, es posible que pueda irse a casa hasta que llegue el momento del parto. Alternativamente, su médico puede recetarle corticosteroides para acelerar el desarrollo pulmonar de su bebé y sulfato de magnesio para proteger su cerebro. Dependiendo de la cantidad de sangrado, es posible que reciba transfusiones de sangre.
Informe a su equipo de atención si tiene factores de riesgo o síntomas de placenta previa.
Sus visitas de atención prenatal son una de sus mejores herramientas para mantenerse segura y saludable durante el embarazo. Son oportunidades para que su equipo de atención detecte problemas como la placenta previa de manera temprana y ayuden a controlar su riesgo de complicaciones. Cuanta más información tengan, mejor podrán cuidar de usted. Informe a su equipo de atención si tiene algún factor de riesgo que no conoce o si le preocupa algún síntoma que esté experimentando.
Nota: Hable con su médico de inmediato si experimenta sangrado vaginal en cualquier momento durante su embarazo. Llame al 911 o vaya a un hospital si el sangrado es severo.