Los corales de aguas profundas de Irlanda están ingiriendo microplásticos

El estudio de la UCC dice que es el primer registro ambiental de ingestión de micropartículas por parte de corales de agua fría y que gran parte de la contaminación puede estar relacionada con las aguas residuales de las lavadoras.

Un estudio liderado por irlandeses ha descubierto microplásticos en las aguas profundas del Atlántico Norte y en corales de aguas frías, lo que muestra cómo la contaminación humana ha llegado a algunas de las regiones más remotas del océano.

El estudio encontró evidencia de microplásticos hasta a 2 kilómetros de profundidad en el Océano Atlántico. El análisis de los investigadores también encontró evidencia de que estos corales de aguas profundas pueden no solo estar expuestos a microplásticos, sino que algunos también han ingerido estas partículas.

El investigador afirmó que estos hallazgos resaltan la vulnerabilidad de estos corales, que crean hábitats esenciales para varias especies marinas. La amenaza a estos corales de aguas profundas marca otro problema causado por la creciente contaminación marina.

El estudio dice que es el primer registro ambiental de ingestión de micropartículas por parte de corales de agua fría. El 22 por ciento de las muestras de coral habían ingerido micropartículas, mientras que el 50 por ciento tenía evidencia de adsorción. El estudio también encontró que ninguna de las mismas muestras tenía micropartículas «ni interna ni externamente».

De la ropa al mar

Esta investigación del University College Cork (UCC) analizó muestras desde una profundidad de 605 metros a 2.126 metros de dos sitios cerca de Irlanda, el Porcupine Bank Canyon y el noreste de Porcupine Seabight. Se detectaron micropartículas plásticas y no plásticas tanto en muestras de agua como de coral tomadas en estos sitios.

Este análisis encontró que las microfibras de rayón, utilizadas principalmente en la ropa, eran las micropartículas más dominantes tanto en las muestras de agua como de coral, lo que sugiere que la contaminación está relacionada con las aguas residuales de las lavadoras.

El equipo dijo que este descubrimiento indica una interacción compleja entre las actividades terrestres y la contaminación marina, lo que enfatiza la necesidad de estrategias integradas de gestión ambiental. Algunos de los microplásticos encontrados en las muestras incluyen nailon, poliéster y acrílico.

Los hallazgos del equipo de la UCC llegan en un momento crucial, ya que existe presión internacional que exige a la ONU que complete las negociaciones sobre un Tratado Global sobre Plásticos, que obligaría a todos los países a cumplir con un estándar común más alto sobre el consumo de plástico.

«Estudios como este ofrecen resultados objetivos y de actualidad a las industrias y a los responsables políticos, especialmente en preparación para la última ronda de negociaciones para un tratado sobre plástico», dijo la Dra. Alicia Mateos-Cárdenas, quien dirigió el estudio.

«Comprender el verdadero destino de los microplásticos y otras partículas sintéticas es esencial para desarrollar políticas efectivas y mitigar el impacto de la contaminación plástica».

El estudio fue financiado por el Marine Institute, que también es socio de Astral, un proyecto financiado por la UE por valor de 7,93 millones de euros que tiene como objetivo mejorar la acuicultura a través de nuevas tecnologías y prácticas sostenibles. A principios de este año, los investigadores de Astral utilizaron dos sensores para analizar el agua en busca de microplásticos en un sitio del Instituto Marino Irlandés en Galway.

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