Mochis NoticiasSalud y DeportesCuando comer sano también va
Mochis NoticiasSalud y DeportesCuando comer sano también va
Salud y Deportes

Cuando comer sano también va

Cuando comer sano también va

¿Alguna vez has oído hablar del término ortorexia? Es cuando la gente se obsesiona tanto con comer alimentos «puros» o «perfectos» que empiezan a dañar su salud.

El Dr. Steven Bratman habló por primera vez sobre este problema en 1997. Se diferencia de otras cuestiones alimentarias porque no se trata de cuánto se come, sino de preocuparse demasiado por la calidad de los alimentos.

La ortorexia es una prisión mental.

¿Qué es la ortorexia?

La ortorexia comienza con buenas intenciones: intentar comer de forma saludable. Pero se convierte en una obsesión estricta y malsana por comer sólo alimentos orgánicos, sin procesar y «limpios».

Si bien es bueno saber qué hay en los alimentos, la ortorexia lleva esto a un nivel extremo. Puede provocar que no obtenga suficientes nutrientes, se sienta aislado y tenga problemas de salud mental.

Eso es lo opuesto al objetivo de comer sano.

Historias reales resaltan el problema

Nuestra revisión incluye ejemplos de la vida real que resaltan el impacto de la ortorexia.

Un caso se refiere a una mujer de 28 años cuya estricta dieta vegetariana, inicialmente adoptada por motivos de salud, le provocó desnutrición grave y aislamiento.

Estas historias hacen eco de las experiencias compartidas por algunos de nuestros lectores y resaltan la delgada línea entre una alimentación saludable y una obsesión dañina.

¿Qué tan común es la ortorexia?

Los estudios en la revisión de la literatura reportan tasas de prevalencia que varían, desde el 6% en algunos grupos hasta un impactante 88,7% entre ciertos profesionales, como los nutricionistas.

Estas cifras muestran que la ortorexia es una preocupación creciente, especialmente para quienes están muy interesados ​​en la salud.

La ortorexia está más extendida de lo que se pensaba anteriormente, lo que enfatiza la necesidad de una mayor conciencia y comprensión de esta afección.

La delgada línea entre lo sano y lo obsesivo

Como indica la literatura, es fácil pasar de ser consciente de la salud a desarrollar ortorexia.

Un caso muy conocido es el del bloguero Jordan Younger, cuya experiencia con la ortorexia muestra cómo influencias como las redes sociales pueden contribuir a esta obsesión malsana.

Detectar y ayudar con la ortorexia

Si alguien es muy estricto con su dieta, se molesta cuando no puede comer ciertos alimentos y pasa demasiado tiempo preocupándose por la comida, es posible que esté lidiando con ortorexia.

La revisión de la literatura ayuda a identificar signos de ortorexia, como rigidez dietética extrema, angustia por la elección de alimentos y un sentimiento de superioridad con la dieta. La orientación profesional de dietistas y terapeutas, incluidos enfoques como la terapia cognitivo-conductual, es esencial para abordar la ortorexia.

Es importante obtener ayuda de terapeutas y expertos en nutrición. Pueden trabajar para comprender por qué alguien se siente así con respecto a la comida y cómo pueden mejorar.

Conclusión: el equilibrio es clave

Lo más importante es el equilibrio. Estar sano no se trata sólo de lo que comes; también se trata de ser feliz y no dejar que la comida controle tu vida.

La ortorexia es un recordatorio de que, si bien perseguir la salud es bueno, no debe hacerse a costa de la felicidad y la calidad de vida en general.

La ortorexia nos muestra que demasiado de algo bueno puede ser malo. Necesitamos más investigación para comprenderlo mejor y ayudar a las personas a encontrar un punto medio feliz con la comida.



Source link

Hi, I’m Javier Vega

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *