Santander endurece las normas de trabajo híbrido y anima al personal a volver a la oficina
Santander ha endurecido su política de trabajo híbrido, ordenando a su personal de oficinas del Reino Unido que trabaje el equivalente a tres días a la semana en sus oficinas.
En una actualización reciente de 10.000 empleados, el banco de propiedad española anunció que su política actual de permitir que el personal trabaje dos días a la semana en una de sus instalaciones será reemplazada por un requisito de 12 días al mes, es decir, tres días a la semana.
El cambio se alinea con una tendencia más amplia entre los empleadores de aumentar la asistencia al lugar de trabajo, ya que muchas empresas buscan cambiar el equilibrio del trabajo híbrido hacia más tiempo en la oficina. Este ajuste sigue al anuncio de PwC de que sus 26.000 empleados del Reino Unido ahora deben pasar al menos tres días a la semana en la oficina o en las instalaciones de los clientes, en comparación con los dos o tres días anteriores.
La nueva política de Santander, que entrará en vigor a finales de año, tiene como objetivo que el personal vuelva a sus escritorios y al mismo tiempo ofrezca más flexibilidad que un rígido requisito de tres días. El banco enfatizó que la presencia en la oficina es crucial para el apoyo y el desarrollo de sus empleados, particularmente aquellos que se encuentran al comienzo de su carrera.
La directiva afecta a los empleados de oficina, incluidos 4.500 empleados en el nuevo centro de Santander en Milton Keynes y 1.000 empleados en Londres. No aplica para el personal de sucursal. El director ejecutivo de Santander en Reino Unido, Mike Regnier, trabaja desde su casa en Harrogate, Yorkshire, al menos un día a la semana, aunque su contrato incluye el complejo Unity Place de 150 millones de libras en Milton Keynes como su principal lugar de trabajo.
La medida de Santander es parte de un impulso más amplio entre los empleadores para contrarrestar los arraigados hábitos de trabajo remoto desarrollados durante la pandemia de Covid-19. Sin embargo, algunos bancos, como Lloyds, han optado por un enfoque más indulgente, permitiendo al personal de oficina trabajar desde casa hasta tres días a la semana, con la opción de cinco días durante los meses de verano.
Santander espera que al aumentar la asistencia a la oficina pueda fomentar la colaboración y la tutoría, que considera esenciales para el desarrollo de los empleados y la cultura laboral general.